Por Sebastián Casabé
Desde hace tiempo se está poniendo atención al terruño en donde se realizan los vinos. No queda ninguna duda (aunque sigan habiendo escépticos) que la zona de elaboración y otros tantos factores inherentes a la variedad, le impregnan al vino características únicas e irrepetibles. Gracias a ello, y por dar un ejemplo, sabemos que un Malbec de Mendoza va a ser diferente a un ejemplar nacido en Salta.
Lo que también debemos entender es que no hace falta que las variedades nazcan en diferentes provincias para mostrar sus diferencias ya que incluso, habiendo sido cultivadas en una misma zona, pueden mostrar claros contrastes. Acá va un ejemplo: Por un lado tenemos un Cabernet Sauvignon de la zona de Agrelo, Mendoza.
Bodega Caelum con la asesoría de Guiseppe Franceschini y Hernan Pimentel hicieron un ejemplar que tiene proyección. Un vino joven que presenta una frescura que impacta y conserva las características típicas de un Cabernet Sauvignon: fluidez y notas tanto frutales como vegetales. Acá es de suma importancia el momento de cosecha. En este caso se decidió cosechar antes para que el vino gane frescura. Un vino ideal para quienes quieran entrar, de una forma suave, al mundo del Cabernet.
Por otro lado tenemos otro ejemplar de la misma variedad y zona que el anterior. La bodega Lamadrid Estate Wines nos brinda un vino con un perfil que cambia en forma drástica. ¿El motivo? También el momento de cosecha. Al haber esperado unas semanas más, presenta en nariz notas a fruta madura, cierto mentolado y una estructura otorgada por su paso por madera. Lo que perdió es un poco de frescura pero son decisiones que los enólogos toman para ofrecer el perfil de vino que quieren mostrar.Con estos dos ejemplos quise demostrar cómo, de una misma zona como lo es Agrelo, pueden darse dos ejemplares de una misma variedad bien distintos. Esto nos da la pauta de cuán importante es que la Bodega se adapte a la zona en donde está trabajando. Estas bodegas pequeñas hacen un “trabajo de viñedo”. Se ocupan de las plantas y buscan mostrar en sus vinos perfiles distintos y eso, las grandes bodegas, no siempre pueden hacerlo por hacer vinificaciones en forma masiva.
Prueben y comparen. El primer vino tiene un valor sugerido de $ 230 y el segundo de $300.
